De pronto me surge la duda de que hubiese sido lo mejor , dejar que las cosas pasaran y esperar el tan anhelado cambio o simplemente nunca haber llegado ahí ... pues bien , yo en mi imprudencia elegí ,el de huir sin dar darle la oportunidad a la duda ,a aquella pequeña esperanza que en mi corazón infantil albergaba  cada año , la que nunca llego por cierto,  la cual aquella almita se canso de esperar y simplemente se marcho dejando todo en nada , esperando que ese "nada" se convirtiera en el todo que siempre espero, pero no fue así  .

Y aunque ahora todo parezca pasado , es mas presente . Esa melancolía que ronda en los silencios de los recuerdos , creo que no me dejara tranquila hasta que haya zurcido el agujero en el blusón lo malo es que no encuentro ni la aguja ni el hilo ... esa es mi misión aprontas a las 18 campanadas de mi vida .